28 de marzo de 2010

Columna de Rescate Cardiaco - Ayuntamiento Zaragoza

La consejera municipal de Servicios Públicos del Ayuntamiento de Zaragoza presento esta semana a los medios de comunicación en colaboración con Telefónica, la implantación de diez columnas de resucitación cardiaca en dependencias municipales.
Este sistema aumenta las posibilidades de supervivir a una parada cardiaca del 3% al 75% y está pensado para su utilización inmediata por personal no sanitario autorizado mientras se espera la llegada de unidades especializadas (Soporte Vital Avanzado).
El personal funcionario voluntario no sanitario será formado mediante cursos de ocho horas en equipos de cinco personas. Los voluntarios dispondrán de una tarjeta acreditativa que les permitirá extraer el desfibrilador y avisar automáticamente al centro de coordinación de emergencias SOS Aragón 112.
Los edificios públicos que cuentan desde este miércoles con rescate cardíaco son: Edificio Seminario (4 unidades), Ayuntamiento Plaza del Pilar, Cuartel Policía Local (Ronda Hispanidad – Avd. Puerto Venecia), Pabellón siglo XXI, Auditorio, Sala Multiusos y Teatro Principal.
Se da la circunstancia que al margen de esta presentación los voluntarios de la Agrupación de Protección Civil realizaron la pasada semana un curso de reciclaje en manejo de desfibriladores externos automáticos y reanimación cardiopulmonar, impartido por la Asistencia Médica del Servicio contra Incendios, Salvamento y Protección Civil del Ayuntamiento de Zaragoza. La práctica de estas maniobras es necesaria para el cumplimiento de la normativa del Gobierno de Aragón en esta materia.
Recordar también que desde hace un año una treintena de voluntarios obtuvieron la titulación Salva Corazones DEA, y que a día de hoy ni tan siquiera disponen de un DEA como dotación móvil de asistencia sanitaria urgente. Su paciente perseverancia les lleva a su vez a realizar su formación en días y horarios laborables de difícil conciliación con su trabajo habitual, sin posibilidad de cambios de fechas o alternativas adaptadas, reduciendo notablemente el número de asistencias a los cursos.
Al parecer este tipo de actividades relacionadas con el voluntariado de Protección Civil no parecen lo suficientemente relevantes para la información pública a pesar del interés social manifiesto. Visten de naranja, se les ve por la ciudad, pero realmente pocos saben, quienes son, que hacen y para que estan, son como si estuviesen borrados de la memoria general.